Cuando se pone en venta una vivienda es conveniente resaltar aquellos aspectos que la hacen única o son determinantes para la decisión de algunos compradores. Cada vivienda reúne unas características que conectan con lo que el comprador está buscando. Por ello, es importante conocer las debilidades y fortalezas de nuestra vivienda para buscar el comprador adecuado, sin perder el tiempo.
Desde Lunallar, te comentamos una serie de aspectos, en las que se fija el comprador a la hora de elegir su próximo hogar o inversión:
Ubicación
La ubicación es el principal factor a considerar a la hora de elegir una vivienda. La cercanía al trabajo, transporte público, colegios y centros educativos, supermercados, etcétera, son algunos de los puntos a tener en cuenta a la hora de buscar una vivienda. También nos fijamos en el exterior, si hay demasiada aglomeración de edificios, ruido, aparcamiento, o si se prefiere una zona más tranquila, a las afueras de la ciudad.
Espacio y distribución
Hay compradores de todo tipo, personas solas, familias numerosas, parejas, 1 o 2 hijos. Cada uno busca una vivienda que se adapte a su núcleo familiar. Las personas solas suelen buscar una casa con menos habitaciones, más pequeña, a diferencia de las familias numerosas que buscan viviendas grandes espaciosas, con jardín, etcétera. Una buena distribución de la vivienda será un factor clave en la venta de la vivienda, esto nos permitirá vender a un público objetivo u otro. Hay familias que buscan una cocina amplia, habitaciones dobles o más de un baño.
Luminosidad
La iluminación de la vivienda añade confort al ambiente hogareño, por ello es conveniente conocer las horas de más luz en cada habitación. Es algo que el comprador puede preguntar. Así como tener suficientes fuentes de luz artificial, lamparas y luces bien ubicadas en toda la propiedad.
Terraza o jardín
La terraza o jardín se han convertido, después del Covid, en algo esencial en una vivienda. Cada vez más se realizan actividades en el jardín, tomar el sol, comer, teletrabajar, jugar o tener tu propio huerto. Un espacio exterior en una casa, es imprescindible para muchas familias. En el caso de un piso, muchos compradores buscan que la vivienda cuente con una zona al aire libre, donde tener un momento de descanso y desconexión.
Fachada de la vivienda.
La estética y cuidado de la vivienda también nos afecta a la hora de decidirnos, si el edificio está deteriorado, si tiene grietas o a falta de pintar y restaurar. Son cosas que como vendedores de nuestra vivienda no podemos resolver directamente pero se debe de tener en cuenta a la hora de establecer un precio. La disponibilidad de ascensor, o zonas comunes, siempre es un punto a favor.
Materiales de la vivienda
La calidad de los materiales revaloriza la vivienda. Tipos de suelo, mármol, terrazo, gres, etcétera; tipo de ventana; aluminio, doble cristal, madera, tipo de techo, material de las puertas. Los materiales de la propiedad le otorgan una calidad que influye a la hora de valorar un inmueble.
Eficiencia energética
Cuanto más se pueda ahorrar en luz, agua y gas mejor para el comprador. Por ello es necesario conocer la potencia de la instalación eléctrica, precio, consumo. La instalación del agua, si es con gas, butano o eléctrica. En este artículo puedes conocer medidas para el ahorro energético.
La velocidad de internet.
Con la llegada del teletrabajo, más que nunca es esencial que nuestra vivienda disponga de buena conexión a internet. No solo se utiliza para ocio o contactar con nuestros seres queridos, ahora es una herramienta de trabajo en tu propia casa. Es fundamental que llegue a la velocidad contratada y que la vivienda disponga de fibra óptica para que no haya problemas de conectividad.